Nos atrapó el otoño
en las estaciones del tiempo.
Los hijos ya grandes
nos regalaron nietos
y hacen su vida
como nosotros la hicimos.
Solo nos tenemos
para seguir el camino
hasta la siguiente estación
que sin prisa, nos aguarda.
Queda mucho por andar todavía.
Aún tenemos caricias
para compartirlas.
Besos fortuitos sin avergonzarnos
y millones de historias
que no nos hemos contado.
Adoro el frío
porque buscas mi abrigo
aunque sin quererlo
te hayas llevado las cobijas.
Amo tus gestos
y también tus silencios
cuando me miras muda
sintiendo que te amo.
Mucho hemos cambiado
al transcurrir de los años
y nos seguimos amando
aunque vayan cayendo
las hojas del calendario
porque día a día
mucho más nos ansiamos
sin pensarlo ni preocuparnos
que la próxima estación
sea la última del recorrido
porque juntos sembramos amor
en el jardín de la vida
para llegar a la última estación
cogidos de la mano
y en los labios
un beso flotando
como si fuera el inicio
de un nuevo recorrido.
Daniel Valdman
