jueves, 21 de mayo de 2020

Tiempo

Caen las hojas del árbol
haciendo su único viaje
como del cisne el canto
en su último suspiro.
No volverán las mismas hojas
a enverdecer el paisaje,
aunque tras el otoño, vendrán otras
cargadas de fe y esperanza
obligando a nuevas ramas
a gestar la vida en primavera.
Y así nos pasa a todos
con cada hoja del calendario.
Irrecuperable el día que ha pasado
y cada vez más próximos 
al último canto
y a la vez, ansiando 
nuevas primaveras.
Y ya estando en el otoño
con los cabellos canos
y las marcas en los rostros
que el tiempo fue dejando,
mi alma te sigue amando
sin la pasión de antaño
porque ya no es amor de los cuerpos
sino, de las almas.
Daniel Valdman