lunes, 15 de febrero de 2016

Ayer

Por tus ojos
me metí en tu alma.
Descubrí tanta angustia
que te abracé con cariño.
Sentí la necesidad
de saberte amada
y te dí todo el amor
que mi alma pudo.
No se si logré
secar tus lágrimas
pero hice mío 
el dolor que tenías.
Lo cambié 
por una sonrisa
que para mi,
fue el mejor regalo.
Daniel Valdman