miércoles, 16 de enero de 2019

Hogar

Revuelvo la mezcla
construyendo la casa.
Tu me traes el agua
que mi sed necesita,
pero más me calma tu sonrisa
que me sacia el alma.
Construimos los dos el nido
con un poco de arena
y con mucho cariño
colocando los ladrillos
que protegerán nuestro sentimiento.
Haremos un hogar grande
que siempre esté encendido
y al amparo de su fuego
crecerán nuestras caricias
y será tan puro este refugio
que solo el amor
entrará por su puerta.
Daniel Valdman