nos envuelve en los sueños
que se hacen realidad
en cada una de las caricias
que como las olas,
van bañando nuestra piel
una tras otra
creando torbellinos
de amor y pureza,
de ansias, de deseos
y de un amor tan grande
que no cabe en los cuerpos.
Y te amo así,
entregada a la pasión
o compartiendo el desayuno,
las cosas cotidianas
que nos aunan día a día.
Y cuando más me atraen los detalles
más amo tus vueltas
buscando lo que se te ha perdido
aunque lo tengas frente a la cara.
Y amo tus locuras
como tus aciertos
porque son parte de la vida
que amo compartirla contigo.