Me haces falta
para crearme una sonrisa
cada mañana
con solo pensarte. Para comenzar la jornada
y saber que a mi regreso
me encontraré
entre tus brazos.
Me haces falta
para caminar de la mano
y sentir tu calor
en mi pecho.
Para hundirme en tus ojos
y saber cuanto te quiero.
Para tomar un café
y disfrutar la manera
en que me lo sirves.
Para verte caminar por la casa
y alegrarme de tu gracia
al dar cada paso.
Me haces falta
para soñar
y más que todo,
porque te amo.
Daniel Valdman