perdido entre viejas palabras
que de usarlas tanto
ya no decían nada
sin tener ideas claras
para saber lo que siento.
La inspiración ávida
se equivocó de camino
y se fue con la rutina
firme máquina de borrar ideas.
Dejé de buscar en el alma
profundidades de sentimientos
y me tragó la monotonía
en esas idas y venidas
cargadas de esperas perdidas
vaciando cada minuto del tiempo
sin lograr llegar a ninguna parte.
Si, estuve ausente
y sin darme cuenta,
me perdí dentro de mi mismo.
Daniel Valdman.