domingo, 6 de marzo de 2022

La paz

El jardín resiste este invierno.
Los pequeños capullos
crecen lentamente
regalando la esperanza
de una sana primavera.
Ya los colibríes vuelan
absorbiendo el dulce néctar
de las flores que hallen
decorando así el paisaje
con sin fines de colores.
Absortos disfrutamos
tan espléndido escenario
tomados de la mano
maravillados por lo que vemos.
Los azahares de los frutales
dicen que habrá buena cosecha
mientras mariposas y abejas 
lo que dejaron los colibríes
se van llevando.
Cómo no amar la vida
más aún sintiéndote a mi lado
comiendo con los ojos
lo que la naturaleza nos ha brindado
y el amor que nos tenemos
en los pechos va estallando
emocionándonos como niños
por el jardín que hemos creado.
Daniel Valdman