me recuerda tus caricias,
limpias y puras
con todo el sentimiento.
Estremece mi ser ese recuerdo
y se eriza la piel
nuevamente sintiéndolo.
Tus manos en mi rostro
reflejan el tuyo porque te veo
y la ansiedad de besarte
puede más que la imagen
a que la mente me lleva.
Es injusta la memoria
porque me trae de ti
lo que más quiero
y ahora, que tanto te ansío,
es cuando no te tengo
pero también esto,
es otra manera de amarte.