de tu belleza
embriagándome
con el perfume de tu piel.
Quieren memorizar mis manos
cada curva, cada rasgo
no para saberte mía
sino, para grabarte
en su memoria
y cada vez que te piense
sienta en ellas
tu presencia.
Se llena mi espíritu
de tu hermosura,
la que llevas en el cuerpo,
la que siento de tu alma.