sábado, 31 de diciembre de 2022

Momento

Siento tu mano
apoyada en mi hombro
como queriendo quitarme el gesto
adusto por cierto
que refleja mi rostro
sin saber lo que estoy pensando
que me tiene preocupado
y tomando fuerte la conciencia,
ni siquiera lo entiendo.
Realmente me faltaba eso,
tu mano en mi hombro
diciéndome que no estoy solo,
que no es grave la circunstancia,
que a pesar que mi ser invada
la preocupación inexistente
puedo contar con tu apoyo
como cuento con él desde siempre
porque eres la única que comprende
la locura de ser poeta.
Y se pierden las palabras
en infinidad de letras
sin encontrar el pensamiento o las ideas
que me abstraen sin quererlo
agradeciendo tu rescate
con una mano en mi hombro
y en la otra, la caricia que me invade.
y te amo, quizás por ser poeta
o quizás por estar loco.
Daniel Valdman.