miércoles, 14 de febrero de 2018

Huerta

Remuevo la tierra
de nuestra huerta
soñando con el jardín
de los sentimientos.
Cada terrón que cavo
es un beso que te doy
como si estuviera labrando
el nido de amor
donde florecen los sueños.
Porque cuando recorro tu cuerpo
labro en cada pliegue
con una caricia
y cultivo una infinidad de besos
para hacer con ellos
la vida.
Daniel Valdman