El entusiasmo
llenará tus fibras
y te sentirás valiente
para enfrentar al mundo.
Rebosarás de energías,
la sonrisa flotará en tu rostro
y verás que es posible
crear cualquier maravilla.
Serás dueña de ti
y no habrán barreras
que te limiten.
Estarás plena, sagas, atenta
y marcharás triunfante
ante los ojos de la vida.
Y te veré de lejos, con cautela,
poniendo mi fe y mi fuerza
para que con nada te tropieces.
Y aunque no me veas,
ante tus logros estaré presente
orgulloso de ti, porque te quiero.
Y porque te quiero,
serás libre para que crezcas
y si así lo deseas,
volarás hacia mis brazos.
