viernes, 12 de mayo de 2017

Rendido

Baja el agua del río
buscando su salida al mar
como así baja mi destino
para encontrarse con tus brazos.
Es tanta la ilusión
de compartir este sentimiento
que no alcanzan los pensamientos
metidos entre fantasías y sueños
en como poder amarte.
Quizás con un abrazo constante
o con un beso profundo,
o quizás con la caricia suave
y una rosa cada día
para que te llene de alegría
el saber que me tienes apresado.
Soy tu escudero, tu sirviente, tu majo
rendido ante la sonrisa
que me das de pago
y feliz yo de ser tu esclavo
sabiéndome el poseedor de tu cariño.
Daniel Valdman