contemplando sueños,
nos adueñamos de la inmensidad
más allá de los mares
y navegamos juntos
por distintos paisajes.
No tiene límite la fantasía
y por cada puerto
al que arribamos
nos asombramos y entusiasmamos
por el espectáculo
que nos brindan.
Y estamos aquí,
sentados en la arena
disfrutando más que
los sueños y el mar,
lo mucho que nos amamos.