andaremos el mismo camino,
dejando huellas en la arena
sin rumbo ni destino.
Solamente viviremos
la intensidad de amarnos,
bajo el sol, bajo las estrellas;
aunque esté nublado
o en medio de tormentas.
Que este amor perdure
bajo todos los cielos,
en el campo,
en las ciudades
o en el mar como al principio,
dejando huellas en la arena.