lunes, 18 de marzo de 2024

Otoño

Sopla el viento
tapizando los caminos
de un tapiz dorado
por el otoño que ha cumplido
con las hojas que han caído
porque el tiempo les ha llegado.
Al igual que el calendario
que al pasar por nuestras vidas
va cayendo día tras día
el tiempo que vamos dejando.
Y así como caen los frutos
ya maduros del árbol
experiencias se van sembrando
en la tierra virgen de las conciencias.
Nos avisa este otoño
que el invierno se aproxima,
que cada vez hay menos tiempo
para disfrutar la vida
y por eso amada mía
lo único que te pido
es que no me sueltes de tu abrazo.
Que me dejes sentir
el calor de tu cariño
aptretándome con todas tus fuerzas
hasta que el suspiro se me acabe
mientras los ojos cerramos 
y un beso enamorado
nos traiga todos los recuerdos
de cada día que nos hemos amado,
de las caricias que nos hemos dado
y de cada sueño que hemos cumplido.
Será la herencia que habremos dejado,
el amor que nos hemos dado 
con la promesa de no abandonarlo
por más duro que nos golpee el invierno.
Y por eso hoy te pido
que sea muy fuerte tu abrazo
y aunque se nos escape un suspiro
que sangre nuestros labios
en un beso infinito
por los años que hemos pasado
y por los que aún
nos quedan por vivirlos.
Daniel Valdman.


domingo, 17 de marzo de 2024

Espera

Cuánto tiempo se gasta en esperas?
Que el dependiente lo atienda.
El transporte que no llega.
El dinero por cobrar.
La fila que no avanza.
Y uno montado en la desperanza
sin paciencia ni calma
tratando de acelerar el sosiego
como si se detuviese el tiempo.
Y mientras el tiempo avanza
uno quieto en la espera
volviendo a contar
cuántos impacientes tambien aguardan
tragando desesperos 
sin poder liberarse
para no perder el puesto.
Entonces en la espera involuntaria,
extraigo de mis fantasías sueños,
que esta tormenta algún día pasa,
que el sol brilla en la mañana
y las hojas relucen 
con sus gotas de rocío
mostrándolas como alhajas
en el más hermoso evento.
Y me quedo casi dormido
entre mis sueños
hasta que alguien dice
"Señor, por favor avance"
y vuelvo a la realidad
del tiempo perdido
en la espera involuntaria
raptado de mis sueños.
Daniel Valdman. 

sábado, 16 de marzo de 2024

Abrazo

Así como tomo tu mano
deseo estrechar tu espalda
y que el abrazo lo diga todo
sin pronunciar palabra
sintiendo que las almas
superaron soledades vencidas.
Atrapar tu aliento
en las fuerzas de mis brazos
entregándome por completo
al poder de tu caricia.
Y el calor que creamos
al juntar ambos cuerpos
construya mundos de cariño
donde se pierda la conciencia
apropiándonos del universo
donde solamente existan
dos encontrados habitantes.
Así como tomo tu mano
deseo estrechar tu espalda
sin pronunciar palabra
mientras el silencio nos acurruque
compartiendo los mismos sueños,
las mismas ansiedades
venciendo a las adversidades
que nos tuvieron tan solitarios.
Te propongo la vida
en este abrazo sin palabras
y que los corazones nos digan
el futuro de nuestro destino.
Daniel Valdman.

jueves, 14 de marzo de 2024

Huerta

Como si sonriese
el jardín florese
al contacto de tus manos
porque el cariño se contagia
y el amor se devuelve.
No hay mejor abono
que el entregado con el alma
ni mejor rocío
que hacerlo con la sonrisa.
Y así es la vida,
se cosecha lo que se siembra
y si la temporada es buena
serán grandes y ricos
los frutos que se recojan.
Y por ello,
acaricio tus cabellos
como tu las rosas
sembrando sentimientos
en cada espacio de la huerta
para recoger caricias en el espíritu,
amor en las miradas
y entre las almas, ternura.
Daniel Valdman.



miércoles, 13 de marzo de 2024

Amanecer

Estas en mi lado del lecho
adueñándote de la almohada
y la tibieza de tu cuerpo
me hace quedar otro rato en la cama
alentando la pereza
de poder disfrutarte.
No hay caricias,
solo el calor entre cobijas
enredado entre sueños
que al despertar se olvidan.
Delicioso el momento
entre dormido y despierto
mientras el amor fluye
simplemente en silencio
rompiéndolo solamente
el canto de las aves.
No es realidad ni tampoco un sueño.
Es el cariño que abriga
con mantas de sentimiento
en el roce de la piel
despertando así el alma.
Ya comenzará el día
con las obligaciones que claman
y abandonarte dormida
ocupándome la almohada
me duele como una herida
porque comienza la jornada
y contigo dejando
lo mejor de mi vida.
Daniel Valdman.


martes, 12 de marzo de 2024

Abono

Abono mi flor
con un beso en la mejilla
creando en sus sueños
jardines primaverales.
Volarán mariposas y abejas
trayendo color y dulzura
a todo el paisaje
en el placer del sueño suave
que durará hasta que despierte.
Y al hacerlo, estirará los brazos 
como pétalos de rosa
feliz de haber soñado
aunque al momento 
no lo recuerde.
Y la sonrisa fresca
que emane de sus labios
sera mi premio ansiado
tras haber amparado
la fantasía de su sueño.
Daniel Valdman. 


lunes, 11 de marzo de 2024

Evolución

Se quedaron las voces de los niños
impregnadas en las paredes.
Aún se escuchan sus gritos y sus risas
haciéndose uno partícipe
de tanta bulla y tanta alegría.
Las pareedes aún resuenan
con los golpes de pelota
mientras las baldosas resisten los saltos
que se dieron en cada vuelta de la soga.
La casa está en pié
y permanece entera.
Puede ser que yo sea
su último habitante
pues el progreso ya llega
y los edificios se comerán los jardines
y gran parte de la historia
de los niños que llenaron
las paredes de bullas y gritos
y que quedarán unicamente vivos
en el inmenso poder de la memoria.
Daniel Valdman.

domingo, 10 de marzo de 2024

Hogar

La cabaña abandonada
con pastizales que la rodean
rememora tiempos idos
con infinidad de historias.
El columpio en el árbol aún chirria
la alegría de los niños
cuando en él se hamacaban
y con el juego reían.
Y ahora, con las paredes deshojadas
y las tejas por caerse
solo le da amparo a la gente
que se pierde entre los campos.
Hubo en ella festejos, nacimientos,
cálidas noches de invierno
al crugir de las brazas por los leños
cocinándose el cariño, el amor y el alimento.
Parado frente a ella
la veo como un monumento
por donde han pasado
mis hermanos, mis padres, mis abuelos
y cuantas familias antes de ellos.
Me duele ver la cabaña abandonada
y una sentida lágrima 
rueda hasta mi cuello.
Daniel Valdman.

sábado, 9 de marzo de 2024

Visita

Hay una pequeña ardilla
que me da vuelta la casa.
Me esconde el tintero,
las paredes me las raya,
no encuentro el almanaque
y así no se si es hoy o mañana.
Las cortinas me las corre
y del día me hace noche.
En la cocina puso el baño
y la estufa es un derroche.
El café en otro lado
y el azúcar aún no encuentro.
Y no hablar de los granos
con los que seguro llenó su panza.
El atrevimiento de esta ardilla
no da para fantasías.
El espejo lo dio vuelta
y al mirarme no me encuentro.
Ya no se cómo afeitarme
si al revés o al derecho
y el peine lo puso a un lado
justamente donde yo no llego
y con el poco pelo que tengo
no me queda más remedio
que salir despeinado.
Con sus juegos me está enloqueciendo
pero esta ardilla
con quien la casa comparto
también me muestra su encanto
a pesar de sus caprichos y errores,
y así juntos nos alegramos
de disfrutar la vida como locos.
Daniel Valdman.


viernes, 8 de marzo de 2024

Energía

Se corta la energía,
enmudeciendo a la palabra
que se queda amarrada
en un teclado de muchas teclas
cada una con sus letras
que mezcladas así,
no dicen nada.
Y es el trabajo del poeta
crear en el verso o en la prosa
un ramillete de rosas
haciendo de la palabra una caricia.
Sacar un te quiero de la galera
curando así heridas
que se han dado con el tiempo
o el soplo de un te amo
diciéndolo muy suave al oído.
El escritorio está listo
con el café humeando,
los bolígrafos en su sitio,
las hojas en blanco
y las letras del teclado esperando
la explosión de la fantasía
que muy despacio y muy tímida
teme que de nuevo
se corte la energía.
Daniel Valdman.

miércoles, 6 de marzo de 2024

Mirada

Me acerco a ti muy despacio,
no quiero apartarte de tus sueños.
Es muy grande el silencio
porque la ciudad aún
no se pone en movimiento.
Las máquinas calladas
todavía no desperezan
y tu rostro sumido en la almohada
descansa en un mundo
donde nadie entra.
Retengo las ansias de besarte la frente
quedándome en el umbral de la alcoba
disfrutando que no puedes verme
y así poder contemplarte
para llenarme de tu belleza
mucho más marcada por el sentimiento.
Y es solo para mi este secreto
con el que inicio cada mañana.
Siempre en el más profundo silencio
sabiendo cuanto te quiero
y haciéndote mía
solamente con la mirada.
Daniel Valdman.

lunes, 4 de marzo de 2024

Busco

Deseo encontrar la paz
que ayude a mi pensamiento
para encontrar el mejor verso
que regale esperanzas.
Que contagie los sueños
de luz, amor y gracia
embelleciendo las almas
y alegrando las conciencias.
Deseo encontrar
las mejores palabras
que florezcan en colores
creando jardines de flores
como fuentes de aguas
enterneciendo los corazones
ante la belleza de la vida.
Quisiera hallar la sabiduría
para lograr este anhelo
dándole paz a mi alma
y con ella al mundo entero.
Daniel Valdman.



domingo, 3 de marzo de 2024

Margarita

Extiende la margarita
cada uno de sus pétalos
para que una mano adolescente
ponga la fe en su suerte
si la quiere o no la quiere.
Mucha pasión en su pensamiento
deseando que la flor cumpla su anhelo
dándole la respuesta que ansía.
Ya el tallo está cerca.
Muchos pétalos han caído
y su amor escondido
aún no tiene respuesta.
La emoción se acrecienta.
El corazón late despavorido
y tan solo tres pétalos
marcarán su destino
cuando otra mano sincera
acariciándole el rostro
le dice que no busque en la flor apoyo
porque jamás ha dejado de quererte.
Daniel Valdman.

sábado, 2 de marzo de 2024

Sequía

Las blancas nubes
muestran su ausencia
dejando ver la Luna
a plena luz del día.
No habrán aguas,
ni lluvias, ni tormentas
y todo anuncia calma
bajo la cúpula celeste.
Los ríos se desvanecen,
los campos amarillos de sequía
y las flores silvestres
se niegan a decorar las praderas.
Deambulan los ganados
buscando alimento verde
y las plegarias del hombre
se unen con la naturaleza.
Sed, sed de sueños
en vez de pesadillas
rogando que la siembra
de sus frutos algún día
y que la piedad de los cielos
se conmueva en esta agonía.
Una ráfaga de viento
se asoma desde el Norte
trayendo algunas gotas
que parecen promesas
y de repente un estruendo
como si fuera un bramido
diciendo aquí estoy,
para esto he venido
y los corazones saltan
y bailan de alegría
porque sobre la Luna llena
se escucharon sus plegarias.
Daniel Valdman.



viernes, 1 de marzo de 2024

Historia

Otra hoja del calendario
y se van sumando años
al caudal de nuestra historia.
Ya nada la alborota,
la experiencia es muy amplia
y en vez de sueños, los recuerdos
acuden a nuestra memoria.
Cuantos rostros, cuantos nombres
que en algún momento fueron
indispensables en nuestros días
y hoy la distancia nos domina
en kilómetros y en tiempo.
Que lejos están esos juegos de pelota
o el café con los amigos 
en el bar de la esquina
dejando noches de filosofías
donde solo quedaban interrogantes.
Y llegaron los amores compartidos
abandonando las filosóficas sillas
porque ya los compromisos
los llevaban a un destino
donde se creaban las familias.
Y si, así es la vida.
Yo también me he ido
recorriendo muchos mundos
pero llevo a todos dentro mío
porque son parte de la historia
que ahora rememoro
sabiendo que jamás
fue tiempo perdido.
Daniel Valdman.


jueves, 29 de febrero de 2024

Pienso

Solo pienso en ti
y se entorpecen las ideas
para escribir un poema
que se escapa en frases inciertas
porque solo, solo pienso en ti.
Tu rostro tiene la magia
de desaparecerme las palabras
y el canto de tu risa
es la música más preciada
que tan solo con el alma
soy capas de escucharla.
Y cómo hago para contarte
todo esto que me pasa
si te has llevado las palabras
en una simple mirada
que me atormenta y desarma
sin poderte escribir un poema.
Y todo esto sucede
porque solo, solo pienso en ti.
Y no hay bosque ni parque,
ni un pequeño o grande paisaje
que pudiera compararse
con lo que mi alma siente
cada vez que te tengo presente
entre los versos que no te escribo.
Y no pudo escribirlos,
porque solo, solo pienso en ti.
Daniel Valdman

miércoles, 28 de febrero de 2024

Fantasmas

Aveces siento
que me rodean fantasmas,
no se si son mis ojos
o quizás sean las gafas.
Pero los veo dar vueltas
confundiéndose con mi sombra
igual de negras  pero más delgadas
o aveces como estrellas
recorriendo de punta a punta la alcoba
con sus colores celestes, verdes o blancas.
De vez en cuando hablo con ellas
preguntando a dónde van tan apuradas
y me responden que son fantasmas
y que por serlo,
no tienen tiempo para nada
y por eso están afanadas
pues no son de ellas
los tiempos que se acaban.
No quise saber más.
Las dejé recorrer la alcoba
como luciérnagas alborotadas
permitiéndoles hacer su tarea
sin volverme a meter con ellas
porque vaya a saberse
de quien sea el alma que buscaban.
Daniel Valdman.




martes, 27 de febrero de 2024

Ave

Salgo a disfrutar
los cantos de las aves
antes que los motores
las obliguen al silencio.
Es como acercarme 
un poco más a los cielos
cobijándome en la libertad
de la naturaleza.
Y vuelo con ellas
montándome en sus trinos
mientras surcan el aire
y yo, con los pies en la tierra,
solo me queda 
volar en la fantasía. 
Y veo los verdes prados
salpicados de blanco 
con las margaritas,
los ríos transparentes,
los sauces llorando 
porque no tienen flores
y las montañas gigantes
dándoles sombra a los viñedos.
Soy un pájaro, soy un ave.
Soy la libertad
que me regalan los sueños.
Daniel Valdman.


lunes, 26 de febrero de 2024

Cuadro

Fresca la mañana
predice un buen día
mientras descansas en la cama
arropada hasta la cara
tratando de escuchar
de las aves sus trinos.
Y siento que vuelas
extendiendo las alas
por fantasías que te llevan
los gorjeos y sonidos
entre árboles y prados
descubriendo el mejor cuadro
sabiéndolo pintar
con tus fantasías.
Es la ilusión creativa
propia del artista
inventando los colores
que no existen en la palestra.
Mezclas azules, rojos y amarillos
para después contarme
lo que has soñado
dibujándome tu cuadro
con cada una de las palabras.
Y yo, sin ser crítico de arte,
me enamoro de la pintura,
de la que pinta, de sus colores
sin tener un la mano un pincel
ni siquiera una palestra,
pintando solamente
con el calor del alma.
Daniel Valdman.

domingo, 25 de febrero de 2024

Andando

Dirigiré mis pasos
hacia límites infinitos
absorbiendo cada paisaje
que me muestra el destino.
La vida no es comprada,
no me queda mucho tiempo.
Lo gasté en juventudes pasadas
de las que hoy tengo los recuerdos
mostrándome que he andado
ya con las botas gastadas
de patear las piedras del camino. 
Se hacen más lentos los pasos,
el equipaje está casi vacío,
las fuerzas se van mermando
pero en el Sol tengo el rumbo fijo
para no perderme
tras tantas veces me he perdido.
La brújula de la ansiedad
siempre me impulsa hacia adelante.
No importan cuantos ríos
o montañas o abismos,
o mares con su bravura
que me invitan a la aventura
de lanzarme a sus aguas
dejando que las corrientes
me sorprendan como guías.
Voy buscando a las sirenas
que me canten la canción de la vida.
Daniel Valdman. 

sábado, 24 de febrero de 2024

Tiempos

Gira la manecilla del reloj
tratando de alcanzar su propia sombra.
Y así a veces recorremos
gran parte de nuestra historia
tratando de alcanzar
algún instante del pasado.
Y dan vueltas los recuerdos
confundidos entre ellos
miles de rostros
cada uno aún más ansioso
de saber su nombre
o desde cuando está en mi memoria.
No, no es melancolía
ni la enfermedad que me domina
haciéndome olvidar las cosas.
Es simplemente la vida
acercándome al punto de partida
donde se hacen realidades
casi todos los sueños.
Y si, innegablemente se ha vivido
y todo lo aprendido
servirá para la próxima ronda
que quizás se de
a la vuelta de la esquina
o quizás, montado en una estrella.
Daniel Valdman.

viernes, 23 de febrero de 2024

Reencuentro

Tengo el corazón abierto
y los brazos extendidos
anticipando nuestro reencuentro
tras la distancia 
que nos impuso el destino.
Pinté los árboles de verde
de un verde infinito
y quité las espinas de las rosas
para que no te dañen 
al sentir sus aromas.
Aboné los prados
de margaritas plagados
y les enseñé a las aves
la melodía que te gusta.
Invité al Sol
para la hora que te acompañe
y le rogué a las nubes
que no oculten a las estrellas.
Deseo que el universo
se asombre de tu belleza
cuando entres por la puerta
de mi corazón abierto
y te envuelvas en mis brazos
extendidos para ello.
No puedo darte mejor bienvenida
que decirte cuanto te quiero.
Daniel Valdman.


jueves, 22 de febrero de 2024

Abrazo

Une el abrazo
para compartir los cuerpos,
el calor, el sentimiento.
De las almas los secretos
cuando no alcanzan las palabras.
Las necesidades, los sueños
y lo más importante
es sentir que no se está solo,
que hay otra alma sintiendo lo mismo
y que juntas inventan el apoyo,
la comprención, el cariño, el afecto.
Se estremece la piel,
se inunda el pecho
y la fuerza de los brazos
agradece que exista el abrazo
para sin tener algo forzado
se entregue todo en ese acto
con sinceridad y aprecio.
Con un amigo, con un amante,
con alguien que se compartió
un instante de alguna historia
y que los recuerdos los llevan a extrañarse.
Con un árbol, con una mascota
que llena de amor se acurruca a nuestro cuello
sin querer soltarnos
preguntándonos por qué tardamos tanto
a sabiendas que nos estaba esperando.
El abrazo, quizás sea 
el mejor premio que hayamos recibido
mucho más que un beso,
mucho más que una caricia.
Daniel Valdman.





miércoles, 21 de febrero de 2024

Luz

Cuál mas bella
que tu sonrisa sincera
cuando te sientes halagada
y no tienes una respuesta.
O el gesto adusto
cuando te sientes atrapada
en mis juegos de palabras
que no alcanzas a entenderlos.
La luz que generas
en cada una de tus muecas
es la que ilumina mi alma
pues no hay cosa más bella
cuando te quedas sin palabras
y lo dices con la cara
creándome la gracia
de poder disfrutarte.
Es un idioma aparte
que solo yo comprendo
y me obliga a abrazarte
mostrándote que te entiendo
y que al fin soy culpable
de meterte en enredos
que a veces,
ni siquiera yo comprendo.
Laberintos de amor entre besos,
de caricias silenciosas
ahogadas de sentimiento.
Daniel Valdman.

lunes, 19 de febrero de 2024

Pasión

Las llamas de la pasión
se hacen presas 
de los sentimientos
y las caricias ardientes
mientras recorren los cuerpos
van cargadas de cariño
en la entrega total de los espíritus.
No hay palabras, solamente gemidos
escapándose los suspiros
en la ansiedad de poseerse.
Las miradas están ausentes,
perdidos los sentidos
y el acto de amor se consume
con un abrazo y un beso.
No quieren separarse los cuerpos.
Necesitan ese instante eterno
elevándose a los cielos
mientras en la pequeña alcoba
se gesta todo un universo
con tan solo dos estrellas
suficientes para tanto sentimiento.
Daniel Valdman.

domingo, 18 de febrero de 2024

Hoy

Se prepara la mañana
para complacerte.
El cielo azul celeste
parece una sonrisa
diciendo que te levantes
y así disfrutar del día.
Ya se que las cobijas
te tienen atrapada
y la calidez de los sueños
te mantiene embriagada
con hermosas fantasías
que no quieres abandonarlas.
Pero hoy es especial,
todo reluce y brilla.
Las hojas se abanican
porque la brisa las  mece
y en cada pétalo de rosa
luce una radiante gota
que el rocío dejó
para mostrar su presencia.
Te extiende sus brazos la naturaleza
acercándose a tu ventana abierta
invitándote a realizar
lo compartido con la almohada.
Levántate, ya despierta
que hoy es el día
y no sabemos si mañana
tendremos una hermosa mañana
como la que hoy se nos regala
llena de luz, de realidades
y de fantasías.
Daniel Valdman.

sábado, 17 de febrero de 2024

Mar

Cantan las olas
su monótona melodía
acompañando mis pasos
que voy dejando en la arena.
Borran en su compás las huellas
llevándose un poco de mi historia.
Todos fueron sueños
que transité en la vida
bordeando abismos y alegrías
hasta llegar a donde estoy ahora.
El amor, destino permanente
sobre todos los mares
me llevó a otros mundos,
a distintos lugares
cosechando caricias y abrazos
conociendo muchos labios
cada uno con su idioma
guardados en los recuerdos
que con su canto me traen las olas
y una pizca de nostalgia
sobre mi rostro hace caer una gota
como si mi ser fuera parte de las aguas.
Voy caminando sobre la arena
mientras toda la playa me acompaña
con la soledad en esta aurora
mientras el sueño no despierta
y mis huellas,
las van borrando las olas.
Daniel Valdman.

viernes, 16 de febrero de 2024

Colores

Pinto las estrellas
con los colores
que te gustan
creando en el cielo
jardines para tus sueños.
Hago nuestro todo el Universo
mientras los planetas bailan
haciéndonos ronda
para que también bailemos.
Noche de amor, locura y magia. 
Mi mano en tu cintura
y la tuya en mi espalda
dando vueltas con la serenata
que nos regala la Luna
mientras los ángeles se contagian
y se unen a la fiesta.
Y toda esta algarabía
por pintar las estrellas
para que alegren tu sueño
mientras estás dormida.
Daniel Valdman.





  

jueves, 15 de febrero de 2024

Tarde

Se nos pasó el tiempo
y siento que se nos hizo tarde.
No me alcanzaron los besos y caricias
que hubiera podido darte
en cada aventura que compartimos,
en cada hora de cada día
repartiéndonos el lecho y las cobijas
o simplemente, en cada instante de silencios.
Las miradas, por más que digan todo,
no me alcanzaron para saciar el alma
de lo mucho que me haces falta
aunque en cada instante estés conmigo.
Siento que tomados de la mano
no hubo suficientes caminos
ni bastante paisajes para ser recorridos
ni fantasías de los sueños 
que hayamos cumplido.
Llevamos una vida ya con hijos y nietos
con los cuerpos vencidos
por el inquebrantable tiempo
que nos cobra lo que hicimos o no hicimos
en el afan de nuestra historia.
Y siento que no he podido
darte las suficientes caricias y besos
ni decirte bastante cuanto te quiero.
Y ya, con los cabellos encanecidos
y las cicatrices en los rostros
siento que te amo
no como a los veinte años
sino ahora, con la paciencia ganada,
la comprención ilimitada
y esta fuerza de cariño
que surge tras tantos años
y siento que no me alcanza.
Daniel Valdman.


miércoles, 14 de febrero de 2024

Brisas

El amanecer fresco
promete un hermoso día
aunque el Sol con su sonrisa
lo quiera tornar más caliente.
Me cobijo en la ternura 
que me regala tu sueño
que sin preocupación alguna
lo construyes en el lecho
mientras con todo el silencio del mundo
quisiera ser parte de ello.
Navegar por los mares de las fantasías,
hundirnos en espirales tormentosas
saliendo airosos tras cada aventura
y disfrutar así la vida
tal cual como son los sueños.
Pero estás a mi lado aún dormida
y envidio la tranquilidad con que respiras
mientras que con el desvelo encima
solo pueda mirarte, para no despertarte
ni siquiera para hacerte mía.
La frescura de la brisa
mece las hojas en las ramas
y las aves cantan
agradeciendo el cambio del clima.
Y tu, aún dormida,
sin querer despertarte
para compartir este paisaje,
te arropo más con las cobijas
y te abrazo con el alma.
Daniel Valdman.

domingo, 11 de febrero de 2024

Sirena

Se cruzaron las miradas,
nos identificamos.
La ansiedad de conocernos
juntó ambos caminos
cambiando nuestro recorrido
para darnos un poco de tiempo.
Parecía una fantasía
y a la vez, algo cierto.
No fue difícil romper el hielo
porque ambos estábamos dispuestos
a correr esa aventura.
Tras un café, sirvieron otro
y muchos más sin aturdirnos
embriagados en la conquista
tratando de detener el tiempo.
Y navegué por tu rostro,
absorví cada detalle de tus ojos
y me embelecé con la música de tu voz.
Eras la sirena que me llevaba al precipicio
mientras me entregaba rendido
a la magia de estar contigo
y disfrutar tanto de este encuentro.
Y así pasaron los años
y estamos aquí recordando
sin soltarnos de la mano
mientras maravillados estamos
recorriendo nuestra historia.
Daniel Valdman.


sábado, 10 de febrero de 2024

Nubes

Acostados en el prado
jugamos con las nubes
dibujando animales extraños
que realmente no existen.
Llevamos la fantasía
cual si fuéramos niños
y liberamos nuestros bríos
haciendo cuentos increíbles.
Y nos divertimos y nos reímos
y le sumamos un roce de las manos
que se convierte en cosquillas
y más luego en abrazos.
Me dominas, te domino
y los besos caen a los labios
ya dejando de ser niños
mientras las nubes son testigos
del romance que acunamos.
No importa la edad que tengamos.
Por quienes somos nos amamos
como hace ya tantos años
tras hijos y nietos ya crecidos
y nosotros, un par de abuelos
nos seguimos divirtiendo
acostados en el prado
con los ojos bien abiertos
dibujando unos cuentos
con los nubes en los cielos
creando animales extraños.
Daniel Valdman.

viernes, 9 de febrero de 2024

Minutos

Cinco minutos más.
Casi no puedo despertarme.
Parece como si el cansancio
se quisiera cobrar
todas las noches desveladas
buscando una prosa o un verso
o tan siquiera una palabra.
Era tan intenso el sueño
que los músculos no reaccionaban
sin saber lo que en él ocurría
ahora que estoy despierto
con todas las ganas de volver
a enredarme en las cobijas.
Cinco minutos más
y se me escapa el día.
Debo atrapar las fantasías
que necesita el poeta
para ofrecérselas a la reina
que gobierna su sentimiento.
Debo inspirar el verso
que deleite a su nobleza
y hacerle sentir su belleza
más profunda que mis humildes ojos.
Y en este momento tan ansioso
donde las rimas se acumulan,
no me he movido del lecho
y en esos cinco minutos más
ya conté toda mi vida.
Daniel Valdman.



jueves, 8 de febrero de 2024

Jornada

Ya se apaga la jornada
y a pesar del cansancio
raudos marchan mis pasos
para encontrar en tu pecho el abrazo
que realmente, alimenta mi alma.
Golpean entre si las herramientas
poniéndole música al sendero
haciendo el camino más llevadero
y la distancia más cercana.
Y te imagino en el umbral aguardando
ver la punta extrema de mi sombrero
y alborotada de alegría
corres a mi encuentro
sujetando un poco del peso
de las herramientas que llevo encima.
Ya se siente el aroma a leños
en el hogar crujiendo
calentando la comida
y nos miramos con una sonrisa
como que antes de llegar
ya alimentamos el hambre.
Y el beso no espera
y antes de cruzar la puerta
viendo en tu cara la expresión más bella
te digo muy despacio al oido
que gracias a ti,
que hermosa es la vida.
Daniel Valdman.



miércoles, 7 de febrero de 2024

Progreso

Es muy temprano todavía
y el sueño se ha fugado.
Vaya a saberse con que he soñado
que el desvelo me está robando
lo que me pertenece como descanso
tras una larga jornada.
Aún las aves no cantan
y el cielo está nublado.
La escarcha pinta todo de blanco
y la neblina va creando sus fantasmas.
El sonido de las máquinas
del silencio hace gala
mientras trato de manejar la palabra
tras un cuento, un verso o un poema.
La noche me envuelve frente al teclado
divirtiéndose conmigo 
poniéndome algunas trampas
sabiendo él que bien no lo domino
en la cara se me ríe a carcajadas.
Cuántas tecnologías
mi generación ha superado
que corre a pasos agigantados
sin poder alcanzarlos
con tanta vida ya cumplida.
Es el futuro que antes se ha soñado
con fantasías creídas imposibles
que hasta la Luna y los demás astros
temen la invasión de los extraños
que hoy viven en la Tierra.
Y desaparecen los versos con sus poetas.
Los libros reposan en las bibliotecas
con la imaginación que de niños tuvimos
y hoy, tras un teclado, 
se hicieron realidades. 
Ya no se puede hablar del pasado,
se me hace muy distante
cuando el sueño era una pelota 
o jugar a las escondidas en la calle
y las puertas se mantenían abiertas
para recibir a cualquier visitante
para compartir un vinito o un mate
disfrutando la vida sin carreras
y sin teclados.
Daniel Valdman.