jueves, 3 de noviembre de 2016

Libertad

Cae como de cántaro el cariño
regando los sentimientos
que invaden nuestros espíritus.
Ansío tus caricias,
me ahogo en tu mirada
sintiendo que en el pecho estalla
una pasión desmedida.
Pienso en ti a cada instante
y no hay cosa que haga
donde no estés presente
haciendo juntos un mejor mañana.
Eres mi fe, mi esperanza
y estando entre tus brazos
la rebeldía de mi brío se calma
entregándote todo lo que siento.
No, no es el placer de los cuerpos;
es la libertad de las almas.
Daniel Valdman