jueves, 10 de agosto de 2017

Visita

Te he visitado de nuevo.
Entre sin permiso
por tus sueños
y recorrí cada uno 
de tus sentires.
Me vi reflejado en tu pecho
volando en uno 
de tus suspiros.
Sentí tu aliento
y esa sonrisa plácida
me incitó a darte un beso.
Te dejé tranquila.
Acomodé las cobijas
para que no sientas frío
y me fui despacio
para que sigas soñando
con la caricia con que te amo.
Daniel Valdman