viernes, 17 de febrero de 2023

Amanecer

Amanecí con un te quiero
en los labios
mientras miraba como dormías.
Controlé la intención de darte un beso
para respetar el sueño
en el que estabas sumergida
que debería ser muy bello
por tu respirar tan lento.
Despacio enfrenté la madrugada
dejando las cobijas dobladas
para que no sientas mi ausencia
al venir a escribir un poema
que dibuje una sonrisa en tu cara
y un estallido en el pecho.
Vine a contarte el te quiero
que quedó entre mis labios
en la madrugada de este verano
tras haber pasado juntos 
tantos inviernos,
tantos sueños compartidos,
tantas ilusiones en el tiempo
que se hacen realidad 
en cada abrazo, en cada beso
o en el silencio de tu sueño
del que no quiero despertarte.
Quizás sueñes conmigo
mientras no me canso de mirarte
y se me escapan las rimas
y con ellas los versos
con que traté de contarte
el poema de un te quiero
que quedó entre mis labios.
Daniel Valdman.