domingo, 6 de septiembre de 2020

Entrega



Clama tu piel las caricias
de las que no se intimidan
mis manos en darte
y así poder contagiarte
de la pasión que me domina.
Los labios comen ansiosos
cada uno de tus poros
que exhalan amor y cariño.
El acto es verdadero
porque se juntan los cuerpos
para entregarse el alma
con la pasión limitada
al vendaval del sentimiento.
Y nos amamos
sin prohibirnos nada
porque el amor es eso,
una entrega de todo.
Daniel Valdman