recorren mis sentidos
imaginándome a ti abrazado
contemplando juntos
desde la cabaña,
el paisaje del prado.
Sabemos que mas allá
el mar inunda el mundo
y su música nos llega
para acompañar el momento.
Y nos miramos sin cansarnos
de compartir el abrazo,
entregándonos a la dicha
de sentir cuanto nos amamos.
No hacen falta caricias, ni besos;
las palabras escondidas
en tan hermoso silencio
que tras el prado, el mar y tu mirada
hacen del amor nuestro universo.
