jueves, 7 de febrero de 2019

Instante

Nos desangramos en miradas.
Quieren disimular las palabras
la intensidad del deseo
pero es inútil su esfuerzo
pues por más que lo intenten
no pueden hacerlo.
Es evidente la ansiedad del beso
y las caricias se alborotan
al ritmo que bulle la sangre.
Ya no controlo mi ser.
Es tan poderoso el sentir
que te atraigo a mi
en un ardiente abrazo.
Le respondes a mis labios
y así es como dejamos
que la pasión nos domine.
Te amo y no solo en este instante.
Es que te llevo en la sangre,
en la conciencia
y sobre todo, en el sentimiento.
Nos amamos en la carne
para dejar volar las almas.
Daniel Valdman