esperando su cultivo
y cada semilla que se siembre
será la esperanza
de un mejor mañana.
Y habrá muchas semillas regadas
así como mis caricias
siembran amor en tu alma.
Y aquí, con el azadón y la pala
voy labrando la tierra
pensando en ti mi amada
que en el hogar me aguardas.
Y amo mi faena
porque tendrá la mejor recompensa.
Llegar a tus brazos
sin importar mi cansancio
porque tu sonrisa todo lo llena.
Y te amo como amo a esta tierra
porque es esperanza, es vida
como los besos de tus labios,
como la mirada que me brindas
pidiendo que te siembre de caricias
que florecen de mi alma.