lunes, 10 de enero de 2022

Antiguo

Cambian los tiempos
y con ellos, todo ha cambiado.
La humanidad viaja al espacio
robándole sueños a los enamorados
tratando de conquistar nuevas estrellas.
Dejó de ser la Luna testigo de promesas
y los astros del cielo cambiaron sus nombres
enloqueciendo así a los navegantes.
Y el amor no se puso a salvo
de tantas reformas.
Te llamo, me llamas
o te dejo un mensaje.
Y se acabó la expectativa
de recibir una carta con unas líneas
con la sinceridad en la pluma
de lo que dicta el sentimiento.
Las caricias no traspasan
la imagen de la pantalla
y el calor de un beso se queda en el aire
aunque sea tan simple como en la mejilla.
Tu y yo menos mal somos antiguos
y necesitamos rozarnos, tocarnos, sentirnos.
Hablar con las miradas, aspirar el aliento
que produce la voz con las palabras
o compartir los silencios
sin importarnos lo que se lleva el tiempo
temiendo quedarnos sin minutos.
Si, menos mal que somos antiguos
y seguir enamorados
para poder vivir este amor eterno.
Daniel Valdman