viernes, 21 de agosto de 2015

Sendero

No puedo creer en ti, creo;
pues lo que me dice tu mirada
es para sentirlo en el mayor silencio.
No hace falta la palabra,
ni siquiera el beso.
Al tomarme del brazo
aferrándote a mi 
para seguir andando,
ya me habla de tu sentimiento.
Y es tan grande mi sentir
mientras te sirvo de apoyo
que creo ser yo quien se apoya
en el amor que llevas dentro.
Me cuesta concebir la vida
sin que estés a mi lado,
tras los años que nos han pasado
sin despegarnos del abrazo,
transitando el mismo camino,
tu de mi brazo y yo, de tu alma.

Daniel Valdman