entibiando un poco
el frío del océano.
En el café de la costanera
hay una mesa medio vacía
esperando que la ocupes
como aguardé toda la vida.
Sirena de mis sentimientos,
tras tantos años de conocernos
las mismas tradiciones mantenemos
como si fueran del primer día.
Me levantaré a tu llegada,
te correré la silla
y sobre la mesa extenderé la mano
deseando sentir la tuya.
Nos miraremos profundamente.
Te acomodarás como una reina
y orgulloso de que estés a mi lado
me sentiré feliz de tu arribo a la cita.
Me contarás cómo fue tu día,
me mantendré callado
escuchando la voz que amo
y me mantiene amarrado
en el transcurrir de la vida
amándote como te amo,
mirándote fijamente
sin importar lo que cuentes
porque teniéndote presente
yo te seguiré soñando.
Daniel Valdman.
No hay comentarios:
Publicar un comentario