hacia otros tiempos,
de los malos, de los buenos
como si quisieran decirme algo
o estuvieran juzgando
lo que realicé en la vida.
Me abren la mente
ante pequeños detalles
o me muestran personas
que solo vi un instante.
No se cómo se ha abierto
el arcón de los recuerdos.
Quizás la edad,
quizás me llegó el tiempo
de reconocer los errores
de cuando me he equivocado
y ahora que los veo,
ya desde muy lejos,
siento que no fueron pocos
pero imposible remediarlos.
También llegan los momentos
que me producen una sonrisa,
instantes de alegrías,
de pasión, de calor
que me hacen revivir una caricia.
Y mientras escribo estos versos,
en el lecho te veo tendida
volando entre los sueños
en el descanso que te tiene dormida,
y quiero abrazarte, besarte
y con el alma decirte
que valió la pena mi vida
solamente para encontrarte.
Daniel Valdman
