martes, 12 de diciembre de 2017

Vientos

Rugen los vientos.
La lluvia persiste.
El sonido de los truenos
asustan las almas
mientras los rayos
iluminan los sentimientos.
Y están allí, quietos
como si el vendaval no existiera.
Los cuerpos apretados,
las manos inquietas
y los besos en los labios
entre angustias que desesperan
en arrebatos de pasión se entregan.
Dos cuerpos, dos almas
y una sola tormenta.
Daniel Valdman