lunes, 26 de diciembre de 2016

Quedarse

No he de volver
a la suavidad de tus caricias
porque de allí, 
no he de irme.
Estaré expectante
a cada roce de tu piel
y a la sensación
que produce en mi espíritu.
Estaré atento a tus ojos
porque tu mirada
es otra manera de acariciarme
llenándome de amor el pecho
y de anhelos
por conquistar tu alma.
No he de volver
de donde no me he ido
porque es el abrigo
donde se asienta el cariño.
Sutil, suave
y hasta a veces salvaje
haciendo hermoso este idilio.
No he de volver
pues hace tiempo 
que me he quedado.
Daniel Valdman