jueves, 11 de diciembre de 2014

Naufragio

Ser atrapado por una mirada,
por una sonrisa que llena el espíritu
y no sentirse culpable de retribuir
ese espontáneo sentimiento.
Ser la víctima de la sensibilidad
y las ansias de conocer mundos nuevos.
Sumergirse en el mar de posibilidades
que la fantasía enhebra en nuestros sentidos
y dejarnos vencer por la conquista
creyendo que somos vencedores.
En el océano del amor hay muchas olas
y todas las corrientes nos llevan
a que se enternezcan los corazones.
Daniel Valdman