domingo, 1 de febrero de 2015

Travesía

Disculpa si soy terco
es que la naturaleza
me dio un cerebro
que estoy aprendiendo a usar,
pues las almas funcionamos
únicamente por sentimiento.
También me dio unas manos
a las que me cuesta acostumbrar
igual que con todo este cuerpo
que se me dio para poderte hablar.
Siempre fui algo etéreo,
nunca necesité de todo esto
y al enviarme me dijeron
que solo el corazón
será de mi anterior estado.
Y es con él con que te hablo
para decirte que a pesar de mis torpezas,
de mi inseguridad, de mi ignorancia,
vine aquí porque te amo,
a través de las distancias
entre este cuerpo nuevo
y el alma vieja que él guarda.
Daniel Valdman