lunes, 20 de junio de 2016

Lontananza

Te miro a la distancia
y de cariño se me llena el alma.
No es solo extrañarte,
es sentir tu calor en la piel
y la angustia loca de abrazarte.
Hundirme en esa mirada
y querer fundir 
mi corazón con el tuyo.
No es solo el abrazo 
que satisfaga mi espíritu.
Es contagiarte de los sentimientos
que a esta hora me llevan
a escribir lo que siento.
Es amarte sin palabras
para que el espacio lo ocupe el silencio
y que las manos en la lontananza
entreguen las caricias justo a las almas.
Y la paz que traen a los tormentos
de tanto amor, de tantas ansias,
se convierten en un beso,
así, a la distancia.
Daniel Valdman