con toda la historia
que llevo encima.
Con la pasividad de los años.
Con todas las estaciones
que hemos pasado
en este otoño que recién comienza.
Se que te amo
porque me hace falta tu caricia,
me alegra tu sonrisa
y porque te tengo presente
en cada pensamiento.
Te amo porque te deseo
como mujer, como amiga,
como compinche de travesuras,
como consejera de la vida.
Por algún motivo el destino
nos puso en esta aventura
cruzando nuestros caminos
para amarnos, para sentirnos,
para creer en los sueños
que tantas veces perseguimos
y hacerlos realidad
con un beso o una caricia.
Y te escribo que te amo
porque mi alma
me obliga a decirlo.
Porque mi pecho
no puede guardarlo
y porque mi espíritu
solo sabe que te amo.
Daniel Valdman
