lunes, 16 de octubre de 2017

Natural

El cerezo echa 
sus frutos
dejando que en la tierra 
germinen.
Así, el árbol del sentimiento
va creciendo
abonado por nuestro cariño.
Estira sus ramas
con cada caricia
y se llena de flores
con cada mirada.
Un beso, una palabra
y se inundan las almas
de todos los frutos.
Y es así como te veo,
naturaleza pura.
Salvaje como ninguna
y dulce como la fruta.
Y en este enjambre de locura 
es así como te quiero.
Daniel Valdman