miércoles, 14 de septiembre de 2016

Tormenta

Tu cuerpo no es un cuerpo.
Es el mar donde navegan
todos mis sentimientos.
Donde cada uno de los besos
son el oxígeno de las profundidades.
Donde cada caricia rema
para alcanzar el clímax de la costa
y donde el destino no existe
tras tantas sensaciones.
Tus gemidos son olas
que me dan mas fuerzas
para bregar en ese rumbo
donde el cielo se te pega
y hacer un horizonte
plagado de estrellas
manteniéndote allí,
en el cosmos de la excitación.
Eres mar, eres estrella.
Eres el faro que mi ser aprieta
siguiendo la luz en las tormentas
que ambos incitamos
en el acto de amor más sublime.
Daniel Valdman