iluminando en su cima
velo por tus sueños
y los lleno de fantasías.
Te arropo con cariño
en cada caricia
y mido tu suspiro
para saber que estás tranquila.
Y veo el amor
en el rostro que dormita
y una ansiedad de abrazarte
me invade y la sostengo.
No, no quiero despertarte.
Quiero que sigas en el sueño
que ya es suficiente mi desvelo
para en la oscuridad y silencio
poder amarte.
Tu ya lo sabes
porque a veces me descubres
y con un mohín de alivio
te recuestas en mi
para seguir en fantasías
entre el abrazo tierno,
los besos y las caricias.
