viernes, 27 de mayo de 2022

Orden

Todo está muy quieto.
Ellos no avanzan ni retroceden.
Nuestras fuerzas no pueden extenderse
pues no somos suficientes
para cubrir tantos huecos.
Y para peor, cada vez somos menos
para defender las trincheras
que más parecen hospitales
en vez de sitios de combate
para prevenir cualquier ataque.
Y en los momentos así de calma,
mientras se reparan las armas
y se cuentan los heridos,
busco en mi mente tu cariño
que bien sabes me hace falta.
Me escapo de la realidad de las balas
sumergiéndome en el mar de tu mirada,
en la angustia de tus labios
casi suplicándome el beso
que no nos cansamos de darnos
como si fuera el aire de la vida.
Y no me aparto de esa imagen
hasta que una orden me despierta
que debo volver a la guerra
porque se inicia otro combate.
Tengo que atacar y defenderme
para volver a ti 
y seguir soñando.
Daniel Valdman.