la pasé viajando
sin rumbos determinados,
donde me llevase el destino.
Fueron muchos los motivos
por los que armaba las maletas
cargadas de sentimientos en letras
y por delante, los caminos.
Mares, cielos, tierras
dejando en cada lugar la huella
por donde he pisado
con un beso y un abrazo
porque en todo espacio he amado.
Y quizás ese fue mi rumbo
buscar el amor ansiado
anclando mi espíritu
en el puerto de unos brazos
para seguir la aventura juntos
o sembrarnos en algún lado.
Disfrutar amaneceres,
bajo las lluvias mojarnos
o en el lecho quedarnos
inventando nuevos sueños.
Y así quizás seguir viajando
hasta darnos cuenta
que no salimos del cuarto
y que hace ya tantos años
que este viaje
lo hemos hecho juntos.
Daniel Valdman.