porque la distancia
no me dejará tocar tu piel.
Y soñaré con tus besos
y con tus caricias
que me harán estremecer.
Te amaré en la lejanía
haciendo de tu sonrisa
la mas bella ilusión.
Y en esa parte del corazón,
donde estás escondida,
será el altar del sueño
donde siempre te encontraré.