lunes, 31 de enero de 2022

Vino

Amar la vida
es abrazar un árbol
y recibir su energía.
Es sentir tu caricia
cambiando mi mirada
adusta y concentrada
en una tierna sonrisa.
Es saber que mañana
también saldré a la campiña
para traerte el mejor ramo
de tus uvas preferidas
haciendo un festín en la cocina
con un plato y una cuchara.
Es sentir que bajo un techo
estás tu que me aguardas
tras un día de labranzas
renovando sueños y esperanzas
en el vino que saquemos
del fruto que la tierra nos regala
teniendo el sabor del sentimiento
que ponemos en cada beso
y la alegría de nuestras miradas.
Imposible amar la vida
sin que estés presente
porque eres el sol naciente
que me ilumina cada jornada.
Y cuando dices que me amas
repones en mí las energías
que gasté en la rutina cotidiana
y te abrazo fuertemente
para satisfacer a mi alma
que loca y feliz por tus palabras
de mi sentir quiere contagiarte.
Y por eso las uvas frescas
del racimo que te traigo
para embriagarnos del mejor vino
que nuestro amor ha logrado.
Daniel Valdman