jueves, 23 de julio de 2020

Volver

Avanzan las nubes
opacando los cielos.
La calidez del abrazo
no alcanza a entibiar el cuerpo
pero si los sentimientos.
Crece la ternura,
aclara los pensamientos.
Y con ese abrazo, un beso
rompiendo las distancias
que se crearon en las almas
por esas cosas de la vida.
Vuelve la pasión, un tanto tímida
hasta que se liberan las ansias
y los nubarrones se olvidan.
El sol de la sonrisa
emerge en el lecho
mientras se entregan los cuerpos
a la locura de las caricias
y vuelve la vida
a apoderarse de las almas.
Daniel Valdman