domingo, 10 de julio de 2022

Cielo

Siento tu abrazo
como algo divino
que traspasa la piel,
que despierta el espíritu.
Y tu rostro entre mis manos
que no me canso de mirarlo
como si te estuviera venerando
tal si fueras un ángel.
Y siento mi cuerpo liviano,
como si estuviera en el aire
disfrutando con tenerte
y entre miradas amarnos.
Alguien pronuncia mi nombre
tratando de separarnos.
No lo conozco, es un extraño
que me obliga a abrir los ojos
apartándote de mi lado
diciendo que el golpe recibido
no tiene mayor impacto
y que estaré en reposo
hasta que la conmoción haya pasado.
Nada fue realidad,
todo ha sido un sueño
pero la manera en que nos amamos,
solo existe en el cielo.
Daniel Valdman.