domingo, 10 de marzo de 2024

Hogar

La cabaña abandonada
con pastizales que la rodean
rememora tiempos idos
con infinidad de historias.
El columpio en el árbol aún chirria
la alegría de los niños
cuando en él se hamacaban
y con el juego reían.
Y ahora, con las paredes deshojadas
y las tejas por caerse
solo le da amparo a la gente
que se pierde entre los campos.
Hubo en ella festejos, nacimientos,
cálidas noches de invierno
al crugir de las brazas por los leños
cocinándose el cariño, el amor y el alimento.
Parado frente a ella
la veo como un monumento
por donde han pasado
mis hermanos, mis padres, mis abuelos
y cuantas familias antes de ellos.
Me duele ver la cabaña abandonada
y una sentida lágrima 
rueda hasta mi cuello.
Daniel Valdman.