domingo, 10 de febrero de 2019

Divino

Entregarme a tus brazos
es entrar al paraíso.
Dejarte amar,
sentirme amado
y juntos así volar
por universos infinitos
donde solo las caricias
se apoderan de los sentimientos.
Los abrazos, los besos
y las almas flotan 
por encima de los cuerpos.
La danza del amor
marca su ritmo profundo.
No alcanza el espacio
para tantas ansiedades y suspiros.
Para tantos gemidos en silencio
donde solo los te amo
se escuchan sin decirlos.
Y es un instante divino
que deseamos hacerlo eterno.
Daniel Valdman