mientras te abrazo
porque me cuesta creer
tanta alegría.
Es como desearte
aún amándonos
porque el alma estalla
de manera infinita.
Es que te quiero tanto
y tanta es
la felicidad que me transita
que realmente parece un sueño
aunque estés entre mis brazos.
Y por ello,
no me canso de acariciarte
para convencerme
mas allá del espíritu,
que es real este sentimiento,
que son reales tus besos,
las miradas, las palabras
y lo que flota entre los dos
en hermosos silencios.