martes, 28 de octubre de 2014

Vida

El mar me trajo una caracola
que me llevó a soñar 
con profundidades y distancias.
Con otros colores y otros seres.
Con oscuridades abismales
y con millones de historias no contadas.
Me introdujo en un mundo desconocido
y me hizo sentir lo tan pobre de mi vista,
pues solo puede ver
lo que hay en la superficie.
Daniel Valdman

Fe

Ilumina un nuevo sol el paisaje
de otra tierra con esperanzas
de hacer la vida equilibrada
para jóvenes generaciones.
A nosotros, los mayores,
no nos queda alternativa
mas que soñar con los que vienen
a que continúen nuestra iniciativa.
Y habrán nubes y habrán lluvias
y habrán logros y triunfos.
Serán esfuerzos muy duros
que les darán experiencia
pero enseñemos a mantener la conciencia
de no abandonar los sueños 
porque al fin y al cabo son
los motivos de nuestra existencia.
Daniel Valdman