de lo que nos cuentan?
Si el agresor realmente fuera
quien se sintió agredido?
Si de verdad todos los motivos
sean invento de la ambición y fantasía?
Cómo sería la vida
sin tanta rivalidad y competencia?
Ser el más veloz, el más fuerte,
tener las herramientas del poder
para al resto someter
al capricho ocurrente.
Cómo sería la vida?
La imaginación no me alcanza
porque la ambición
siempre está presente
sin poder cambiar a la gente
ni tampoco a la historia
escrita por los vencedores
porque los vencidos
tendrán calladas sus bocas
sin importar el tipo de contienda.
Y el tiempo irrecuperable
seguirá su marcha irremediable
guardando las supuestas verdades
de lo que hace tiempos
nos vienen enseñando.
Daniel Valdman.